Trabaja la pintura a partir de una estética de atmósferas en conflicto: entre el color y la línea, entre la forma abstracta y la definición figurativa de una configuración espacial en movimiento con otra de planos cromático estáticos y en asociaciones concretas.
Su obra tiene referencia al arte pop y usa la fotografía como base estructural en sus pinturas que ahondan temáticas cotidianas y urbanas. Emplea un humor liviano que le da peso a su mirada irónica y crítica de la sociedad actual.
Así mismo la artista alimenta su imaginario personal con apuntes que rescata de crónicas locales y universales de la “prensa rosa” las que son material esencial en sus procesos creativos.